lunes, noviembre 09, 2009

Días de aprender, días de crecer (I)

Últimamente he sido más crítico con cada cosa que me pasa por la vida, y así como otros han escrito lo que en su camino de existencia han podido concluir, yo quiero comenzar a dejar registro de mi propia lista, sin un orden en particular, creada desde lo que me ha venido pasando y lo que ya pasó y me marcó. Valverde le llamaría a esto "automedicamento", otros le dirían catarsis. Para mí es desahogo y una manera bien simpática de encontrar respuestas pues conforme redacto entiendo mejor el panorama de cada situación.

  1. Qué tan diferente es hablar del amor de pareja desde las leyes comparado con hacerlo desde Dios. Los criterios son similares pero lo primero de alguna manera desplaza lo más importante de lo otro.
  2. Lo importante de amar al prójimo está en sentir la escencia del vínculo y no pensar en lo que me gustaría recibir del otro.
  3. Cada paso en la vida merece una buena dosis emocional, pero una más alta racional.
  4. Qué difícil es controlarlo, pero no se puede ir por la vida hablando mal de los demás. Eso no quiere decir que deba evitarse tener y mantener una postura firme y crítica pero al mismo tiempo justa frente a quienes nos rodean.
  5. Parte de la paz interior se logra cuando se aprende a vivir con las diferencias de los demás. Otra parte cuando acepto como soy y trabajo por ser mejor. Pero la parte más grande llega cuando reconozco que Dios por misericordia me la quiere regalar.
  6. Qué bueno recordar de vez en cuando lo importante que es amar la patria.
  7. El compromiso hacia todo lo que se hace es clave al momento de enfrentar los obstáculos que ello trae.
  8. Antes de abordar una discusión es preciso tener presente de manera objetiva toda la situación que la enmarca.
  9. El cariño no se compra, se construye con la plena consciencia de lo que ello representa, lo bueno y lo no tan bueno.
  10. La esperanza viene de la mano de la fe. La fe viene de la mano del amor. El amor viene de la mano de Dios.

lunes, octubre 26, 2009

Hoy es el día para creer

Hoy es el día para creer. Por más que la cabeza insista, definitivamente quiero creer.

Pero no lo haré precisamente pensando en todo lo que me han dicho de Tí sino recordando y sintiendo todo lo que me ha pasado, donde Tu toque ha sido evidente y tus ganas por llamar mi atención hacen que mi capacidad de insistir se quede realmente corta.

Desde lo pequeño que me ha marcado o simplemente ha sucedido, lo ínfimo, lo que por su insignificancia pareciera obra de un insignificante como yo pero que en realidad es una bendición del que todo significa.

Desde lo rápido que ha zumbado por la vida, eso que apenas da tiempo para reconocerlo o incluso sentirlo. Desde lo largo y tortuoso que oprime o que me ha generado dolor, eso que a veces dudo que sea una lección y no un castigo.

Desde lo cotidiano que acontece, lo que parece un canción que se repite y por eso ha perdido todo su encanto para mí.

Hoy es del día para creer que todo eso que me ha pasado no ha sucedido porque yo creo en Tí, sino porque tú crees en mí.

lunes, octubre 19, 2009

Cuando la experiencia habla

Recibí un excelente correo esta mañana, pero como no soy partidario de reenvíos masivos por correo por aquello de evitar ser spammer o peor aún propagador de virus, este es un buen texto para incluirlo como post acá. Espero lo disfruten. ¡Bendiciones esta semana!

ESCRITO POR REGINA BRETT, 90 AÑOS DE EDAD, DE "THE PLAIN DEALER", CLEVELAND, OHIO.
Para celebrar que envejecía una vez escribí 45 lecciones que la vida me enseñó. Es la columna más leída que he escrito. En agosto cumplí 90 años, así que decidí publicar la columna una vez más:
  1. La vida no es justa, pero aún así es buena.
  2. Cuando tengas una duda, sólo toma el siguiente paso pequeño que venga.
  3. La vida es muy corta como para gastar tiempo odiando a alguien.
  4. Tu trabajo no se encargará de ti cuando te enfermes, tus amigos y padres lo harán. Mantente en contacto con ellos.
  5. Paga tus tarjetas de crédito cada mes.
  6. No tienes que ganar cada discusión. Acuerda en que desacuerdas.
  7. Llora con alguien. Te sana más que llorar solo.
  8. Está bien enojarse con Dios, ÉL lo puede soportar.
  9. Ahorra para tu jubilación empezando desde el primer cheque, y si tienes dinero compártelo con tus amigos que mas estimas, los de la juventud.
  10. Cuando se trata de chocolate, resistirse es inútil.
  11. Haz paz con tu pasado, así no te malogrará tu presente.
  12. Está bien dejar que tus hijos te vean llorar.
  13. No te compares con otros. No tienes idea del viaje que ellos llevan.
  14. Si una relación debe ser en secreto, entonces no deberías estar en ella.
  15. Todo puede cambiar con un solo pestañear. Pero no te preocupes, Dios nunca pestañea.
  16. Respira profundo. Relaja la mente.
  17. Deshazte de todo lo que no sea útil, bonito o alegre.
  18. Lo que no te mata, de verdad te hace más fuerte.
  19. Nunca es tarde para tener una infancia feliz. Pero la segunda depende de ti y de nadie más.
  20. Cuando se trata de ir tras lo que amas en la vida, no tomes un NO como respuesta.
  21. Quema las velas, usa los manteles finos, ponte lencería fina. No los guardes para ocasiones especiales, hoy es especial.
  22. Prepárate mucho, después anda con la corriente.
  23. Se excéntrico ahora. No esperes a ser viejo para usar púrpura.
  24. El órgano sexual más importante es el cerebro.
  25. Nadie está a cargo de tu felicidad, excepto tú.
  26. Etiqueta cada uno de esos llamados desastres con esta frase: "En 5 años, ¿esto importará?"
  27. Siempre escoge la vida.
  28. Perdona a todo y a todos.
  29. Lo que otros piensan de ti no es tu problema.
  30. El tiempo cura casi todo. Dale o date tiempo.
  31. Por más buena o mala que una situación sea, va a cambiar.
  32. No te tomes tan en serio. Nadie más lo hace.
  33. Cree en los milagros.
  34. Dios te ama por quien eres, no por nada que hayas hecho o dejado de hacer.
  35. No audiciones para la vida. Preséntate y haz lo mejor de ella.
  36. Envejecer es una mejor alternativa que morir joven.
  37. Tus hijos solo tienen una infancia.
  38. Todo lo que importa al final es que hayas amado.
  39. Sal todos los días. Los milagros están esperando en todas partes.
  40. Si todos tiráramos nuestros problemas en una fuente y viéramos los problemas del resto, agarraríamos nuestro saco de nuevo.
  41. La envidia es una pérdida de tiempo. Ya tienes todo lo que necesitas.
  42. Lo mejor está por venir.
  43. No importa cómo te sientas, levántate, cámbiate y preséntate.
  44. Cede.
  45. La vida no tiene un moño encima, pero aún así es un regalo.

martes, octubre 13, 2009

Carácter v/s nobleza

Si bien no soy el más indicado para hablar de carácter, o peor aún hablar de nobleza, debo decir que estos días han sido una fuerte prueba de cara a entender el límite entre cada una de esas dos virtudes.

Cuando lo meditaba pensaba que una cosa no convive con lo otra, es decir que su naturaleza excluyente hacen de una personalidad un fortín de sentimientos apoyados en lo uno o en lo otro, pero nunca en las dos. Al menos eso creía.

Sinembargo a lo largo de los últimos sucesos personales, donde han habido conflictos ajenos a mí y que aún así me afectan como otros donde estoy directa y fuertemente implicado, encuentro que termina siendo un reto combinar las dos posturas para tener como resultado una personalidad capaz de salir avante en situaciones que parecen o realmente son complejas.

Lo primero que descubro es que el carácter determina la capacidad de sentar una posición, argumentarla, defenderla e inlcuso potenciarla, todo dentro de los márgenes del respeto. Pero también es carácter reconocer lo que no está bien fundamentado o peor aún lo que por necedad no se quiere ver, perdiendo así la objetividad. La construcción de esta virtud demanda una exagerada dosis de coherencia donde se mantengan claras cada una de las partes que la componen, como por ejemplo los criterios con los que se toman una decisión o con los que se determina una forma de actuar frente a algo o alguien.

Por otra parte está la nobleza. Esta capacidad es la más complicada de cultivar y mantener pues por donde se le mire puede ser estupidez o el total convecimiento de ser artífice de sitiaciones no conflictivas. Ser noble sería la capacidad aceptar y asumir una posición SIN PASAR POR ENCIMA DE LAS CONVICCIONES PROPIAS, TENIENDO EN CUENTA QUE EN ALGO SE DEBE CEDER; pero también implica que si se asume una posición de consesión es con el pleno convencimiento que no es para un beneficio propio sino común.

Pensar en mezclar estas dos posiciones que a simple vista parecen contradictorias, resulta ser la oportunidad de medir de qué está hecho cada uno y hasta donde se tiene el control y la objetividad para mantener una posición sin imponerla; también es aceptar con la misma firmeza y certidumbre los momentos en los que se está equivocado o mejor aún, cuando hay otra u otras alternativas para manejar una situación y aceptarlas sin reparo.

miércoles, septiembre 23, 2009

Sólo tú

Porque nuestros proyectos se desmoronan y fracasan
y el éxito no nos llena como ansiamos.
Porque el amor más grande deja huecos de soledad,
porque nuestras miradas no rompen barreras,
porque queriendo amar nos herimos,
porque chocamos continuamente con nuestra fragilidad,
porque nuestras utopías son de cartón
y nuestros sueños se evaporan al despertar.
Porque nuestra salud descubre mentiras de omnipotencia
y la muerte es una pregunta que no sabemos responder.
Porque el dolor es un amargo compañero
y la tristeza una sombra en la oscuridad.
Porque esta sed no encuentra fuente y nos engañamos con tragos de sal.

Al fin, en la raíz, en lo hondo, sólo quedas Tú.
Sólo tu Sueño me deja abrir los ojos,
sólo tu Mirada acaricia mi ser,
sólo tu Amor me deja sereno,
sólo en Ti mi debilidad descansa
y sólo ante Ti la muerte se rinde.
Sólo Tú, mi roca y mi descanso

Javi Montes, sj - Tomado de www.pastoralsj.org

viernes, septiembre 11, 2009

9/11: Día de las diferencias

Otro año más en que se recuerda no tanto el atentado al orgullo patrio de la nación más influyente del mundo moderno sino la fragilidad de aquellos que vemos y somos invencibles.

Lejos de profundizar brechas y alimentar resentimientos con juicios ligeros, considero prudente al menos como ejercicio propio de reflexión, entender el día de hoy en su contexto por lo sucedido y su correspondiente repercusión; es una clara invitación a pensar en detalle acerca de lo que este hecho significó para el mundo, incluso para los que de alguna manera creemos ser ajenos a ello porque no fue a nuestro país el que agredieron o porque sencillamente no tenemos familiares o amigos dentro de la dolorosamente extensa lista de víctimas de ese día.

Lo primero que me queda claro es que todos tenemos un punto débil por encima de lo que aparentamos. Más allá de pretender disimularlo o disimularlos si son varios, como humanos estamos llamados a tenerlos presentes y no dejar que la soberbia nos impida verlos o trabajar en ellos. Más que la agresión misma a él, lo más doloroso será que no hayamos estado listos para manejarlo.

Se llora por muertes de seres humanos, no de nacionales. Este hecho sobrepasó cualquier frontera pues se trata de la agresión a un género que por encima de todo debemos defender. Pero esto también implica que no deben ser los únicos que debemos llorar y por quienes orar el día de hoy; además están los musulmanes, somalíes, iraquíes, chechenios, venezolanos, colombianos, españoles, judíos o mahometanos (entre muchísimos colores más) que han visto truncada su vida por culpa de la obsesión humana por imponer ideas y pasar por encima de las diferencias. Ellos también merecen ser recordados solemnemente y con respeto.

No deberíamos ser indiferentes ante los sucesos que aparentemente son lejanos a nuestras vidas. Todo lo que sucede en el mundo social, político, o religioso está de alguna manera relacionado con cada uno de nosotros. Tarde o temprano una o varias consecuencias serán tangibles y esto no puede pasar por alto en nuestro presupuesto de vida. No se trata de ser en extremo prevenido sino entender qué puedo hacer por mí y por los demás para mitigar reacciones negativas o potenciar las positivas.

Hoy es un día más para reflexionar sobre las diferencias, religiosas, políticas, sociales, raciales, etcétera, que en últimas son las que nos llevan a estos conflictos. Los artífices, provocadores, patrocinadores o simplemente alentadores de estas situaciones algo tienen que ver conmigo o con usted: porque tuvieron mi voto, porque tienen mi respeto, porque aplaudo sus agresiones o imposiciones o peor aún porque les termino dando el "honroso" título de ídolo y en el peor de los casos termino haciendo lo mismo que ellos. Esto no quiere decir que no tengamos la libertad de expresar nuestro favoritismo por alguien o incluso nuestras ideas, pero sí pretende invitar a tener demasiado claras las razones para hacerlo y estar seguro que con ello estoy construyendo una sociedad igualitaria y justa.

Hoy es un día para pensar, no en banderas rotas o en solidaridades por compromiso. Es un día para pensar hasta donde contribuyo para que las diferencias sean insostenibles.

miércoles, agosto 05, 2009

¿Realmente la convivencia es la tumba del amor?

Me encuentro sorprendido ante semejante afirmación pues me deja demasiadas dudas el concepto que manejamos actualmente del matrimonio. Ante esto me pregunto ¿qué me motiva entonces al momento de querer estar con la persona que elijo para tener al lado mío por el resto de mi vida, si no es el deseo mismo de compartir el tiempo con ella?


Tal parece que es suficiente un periodo de vacaciones para darnos cuenta que ya no queremos estar junto a esa persona que nos ha venido acompañando por poco o mucho tiempo.


Curiosamente lo que debe ser el abono de la relación (estar más tiempo juntos) se está convirtiendo en la gota que llena la copa, en medio de situaciones que imagino yo en la inmensa mayoría de los casos, no se gesta de un día para otro sino que termina siendo la acumulación de muchas situaciones mal dialogadas si es que hubo diálogo o sencillamente las que surgen como fruto del cambio que todos los humanos sufrimos con el transcurso de la vida y que finalmente no estaban presupuestadas en nuestros planes de convivencia en ese entonces, cuando decidimos dar el sí. En ese momento sólo contemplamos un horizonte cortoplacista y no afrontando que tarde o temprano esa persona encantadora dejaría de serlo tanto y pasaría a mostrarse como realmente es o como la vida misma le irá diciendo cómo ser.


Todo esto me lleva a varias preguntas: ¿Qué tanto hacemos por superar REALMENTE nuestras diferencias de pareja? ¿Qué tanto hacemos por estar enterados del innegable cambio de nuestras parejas? ¿Qué tanto permito que mi pareja conozca dónde y en qué he cambiado?¿Qué tanto hacemos para que esa persona con la que decidí compartir la vida (incluso en vacaciones) crezca personal, espiritual, emocional y profesionalmente?


Finalemente no es un asunto de optar por finalizar la relación sino lo que se ha hecho o dejado de hacer para que en últimas, cuando se encuentran realmente juntas las dos personas (el propósito de toda unión), la conclusión sea que ya no pueden seguir compartiendo el mismo camino.


No culpemos al verano; lo que lleva a las rupturas es lo que nos falta por hacer para mejorar las situaciones de pareja que algunas redundan en la felicidad y otras no son ajenas a los problemas y por otra parte cuestionarnos sobre dónde estamos los que podemos ayudar a terceros para que encuentren otras salidas diferentes a la disolución. La decisión no debe ser cerrar el libro porque nos estrellamos con el muro de la realidad sino estar listos para que ante la tormenta estemos listos emocional y espiritualmente para esperar la calma.

viernes, julio 24, 2009

Dioscidencia

No puede haber palabra mejor para definir algo que sucede por extraña razón pero con propósito claro. Lo digo categóricamente teniendo en cuenta que cada vez me aburre más que en el mundo hablemos de suerte, fortuna, etc. y dejemos de lado lo que para los creyentes se debe constituir como nuestra verdadera y única razón del por qué de las cosas que no podemos explicar.

¿Cómo definiría usted el hecho de que algo nos puede suceder en el día a día con la intención clara de satisfacernos plenamente? Yo por lo menos, ante la situación que hoy día estamos viviendo con mi esposa donde por completa BENDICIÓN estamos recibiendo demasiados favores del cielo, me he encontrado con esta palabra por medio de un gran amigo y estoy convencido que es una muy buena manera de entenderlo y ver en ello revelado el amor de Dios.

Esto desplazaría lo que nos intenta vender el mundo respecto a las razones que hay detrás de algo que pasa y no hay forma de sustentarlo; no encuentra mejor cuña que llamarlo SUERTE. Lo triste de eso es que detrás de esa palabra que resultaría incluso inocente, se tejen demasiadas intenciones frívolas para hacer creer a la gente que realmente existe (por no decir el negocio que crece alrededor de esa palabra) y que desconoce lo que Dios hace incansablemente por llamar nuestra atención.

En últimas mi mensaje es que al menos por ejercicio para los incrédulos o como buena práctica de fe para los que profesamos amor por Él, por un momento miremos lo que en el día nos sucedió -y no lo estábamos esperando- y lo interpretemos como el gesto que un enamorado hace por ganar puntos con quien obsesiva pero sanamente quiere conquistar.


miércoles, julio 01, 2009

QUISIERA (Parte III) - Final

Quisiera sentirme capaz de hacer todo lo que me propongo, entender que soy humano pero que eso no me exime de dar todo por algo y lucharlo hasta el hastío.

Deja a un lado toda huella que ha marcado tus sueños frustrados y date el chance de comenzar a hacer lo que planeas. Organiza tus metas y aprende a desarrollarlas por prioridad. Entiende que no será posible hacer todo al tiempo.

Quisiera poder abrazar al dolido y espantarle sus angustias para que de alguna manera, así fuera breve, viera tu rostro y en él toda la esperanza que necesita para superar cualquier inconveniente.

Ya lo haz hecho pero no te haz dado cuenta. Ellos me ven a su manera, incluso muy diferente a la tuya, no porque sea menos o más, sino por la manera como siempre me han visto.

Quisiera no olvidarme de tí, dejar de preferir mi autocompasión por encima del placer de un abrazo tuyo y recordar en los momentos más difíciles que lo último que puedo perder es la fe.

Estoy a un Padrenuestro de tí, a una frase alentadora de por medio, esa que te repites a veces sin conciencia de lo que estás diciendo. Por encima de todo estoy yo, listo para escucharte y sobre todo apoyarte.

Quisiera dejar de ser tan necio y escuchar que siempre me dices al oído que todo lo que quiero lo puedo tener, siempre y cuando lo desee y luego me convenza que lo puedo lograr.

No busques respuestas donde no existen. Acostúmbrate que a quien primero debes escuchar es a tu corazón, ese cuartico que me has rentado para habitar en ti durante tu paso por el mundo terrenal.

Quisiera que estas palabras nunca se me olvidaran y que ningún dolor fuera más poderoso que mis ganas de leerlas para darme cuenta en donde me quieres ver.

Te quiero ver feliz, convencido de lo que eres y lo que tienes. Te quiero ver conforme y sobre todo esperanzado en que todo puede ser mejor. Te quiero ver tranquilo después de haber llorado, te quiero ver compasivo contigo mismo y reconciliado con lo que te da tanto miedo afrontar. En últimas te quiero ver siempre junto a mí.

- Febrero 2.002

miércoles, junio 24, 2009

QUISIERA (Parte II)

Quisiera tener la respuesta a todo, al menos a las preguntas que me hago todos los días: ¿Si muriera en este momento iría satisfecho a rendirte cuentas? ¿Puedo hacer de mi mundo algo mejor?

Tu miopía no te deja ver que cada pregunta tiene una respuesta, guardada con celo en el fondo de tu corazón. Bien adentro sabes que tan afirmativas son las respuestas como las ganas de sentirte menos; sólo estás esperando que alguien satisfaga tu ego y te diga lo especial que eres para el mundo pues ya no tu propio aliento es suficiente para tanto delirio de grandeza.

Quisiera abrir mis ojos y ver al lado mío el amor de mi vida y que ante una sonrisa mía provocara su abrazo y no me soltara jamás.

Será preciso que portes un espejo pues a quien debes primero tanto afecto SINCERO es a tí para luego darte a los demás. A veces te amas de manera tan devota que sólo quieres alguien al lado sólo para que te confirme lo especial que eres. Otras veces te quieres tan miserablemente poco que crees que no existe alguien en el mundo que ni por necesidad quiera estar con alguien como tu.

Quisiera convencerme que la felicidad no está en un fajo de billetes sino en un fajo de sueños realizados, que mi papel en este mundo no es verde y marrón sino transparente y ligero, como el que tú utilizaste para envolvernos cuando llegamos a este mundo.

Tu felicidad como la del resto de mortales no se mide en pesos ni quilates. Pero para entenderlo deberás desintoxicarte para así ver en cada obra que haces a nombre de Dios la felicidad que todo el mundo persigue. Recuerda que cuando te mueras no llevarás consigo más que tus méritos ante Dios.

Quisiera poder hacer de este manojo de miedos un espantapájaros y mantener libres de sufrimientos todas mis praderas. Tener la seguridad que todo cuanto quiero lo puedo lograr.

Tus miedos hacen parte de tu baja autoestima. ¿Qué debe pasar para que te des cuenta de todo lo que eres capaz? Confía en tus virtudes, esas que sabes que existen pero no reconoces porque nadie te las ha exaltado.

jueves, junio 18, 2009

QUISIERA (Parte I)

Justo ahora que he espantado mis angustias, te sientas al lado mío, en el lugar desde donde acosaban mis pensamientos, y te atreves a preguntarme cómo quiero sentirme? Pues te diré:

Quisiera reír menos y llorar más pues por reír tanto es que he perdido el sentido de las proporciones y ya no distingo lo que me duele de lo que me hace trizas.

No lloras porque no quieres, pues tienes tanto miedo a ver caer un castillo de naipes que no has visto la fuerza de tus cimientos.

Quisiera que esas voces se callaran por un momento y me dieran al menos un segundo que dure media vida para estar en paz. Con todo y que sus intenciones son las mejores, quiero que todos esos sueños se calmen un poco y me dejen pensar realmente cómo los puedo dar a luz.

Dale uno a uno la palabra, para que sin tanta bulla, te expresen qué quieren ser y a donde llegar.

Quisiera que todo fuera más fácil. Que la ansiedad se curara con dos cucharadas de limón y que una pena de corazón se aliviara con agua fría en los pies.

Todo es fácil pero no lo ves porque te gusta complicarte. Cada situación tiene un principio y un final, pero te enredas porque en el fondo no quieres que terminen. El dolor te complace pues así crees que generando compasión alguien se fijará en ti.

Quisiera que los problemas no fueran tan grandes como mis ganas de dormir eternamente y que por un momento al menos, esa nube perezosa se corriera para que el sol ilumine mi cabeza y cualquier pensamiento oscuro quede sin lugar donde habitar.

Eres tu quien decide albergar pensamientos oscuros y dejarlos crecer cuando la esperanza pierde la pelea y no te insiste más. Si por un momento dieras la palabra sólo a la fe, estarías más lejos.

miércoles, junio 17, 2009

Balada al mal genio - Mario Benedetti

Hay días en que siento una desgana
de mí, de ti, de todo lo que insiste en creerse
y me hallo solidariamente cretino
apto para que en mí vacilen los rencores
y nada me parezca un aceptable augurio.

Días en que abro el diario con el corazón en la boca
como si aguardara de veras que mi nombre
fuera a aparecer en los avisos fúnebres
seguido de la nómina de parientes y amigos
y de todo indócil personal a mis órdenes.

Hay días que ni siquiera son oscuros
días en que pierdo el rastro de mi pena
y resuelvo las palabras cruzadas
con una rabia hecha para otra ocasión
digamos, por ejemplo, para noches de insomnio.

Días en que uno sabe que hace mucho era bueno
bah tal vez no hace tanto que salía la luna
limpia como después de jabón perfumado
y aquello si era auténtica melancolía
y no este malsano, dulce aburrimiento.

Bueno, esta balada sólo es para avisarte
que en esos pocos días no me tomes en cuenta.

martes, abril 14, 2009

Las sorpresas del corazón

Cuando salimos se Bogotá tenía la sensación que lo hacia por tanto tiempo que sería difícil asumirlo, sobre todo teniendo en cuenta que habría una Pascua de por medio.

En la medida que pasó el tiempo, entre los templos del consumismo y el afecto de nuestros anfitriones, desfilaron por mi cabeza demasiadas cosas por las cuales debía dar gracias a Dios: por encima de todo sentirme orgulloso de mi origen por más peso que ello represente; tuve la gracia de nacer en una región que pese a la angostura de sus calles siempre hay alguien atento a responder con una sonrisa ante un saludo sincero.

Lo que aprendí y con lo que regreso es que se necesita a gritos dar gracias todos los días a Dios porque sus propósitos con cada uno de sus hijos son más evidentes de lo que parece. Al menos el mío es sentirme orgullosamente colombiano y si pertenezco a ese país es por algo.

miércoles, enero 14, 2009

Dios existe

Pese a que más de una persona se está rasgando las vestiduras con lo que está sucediendo en Europa con los buses "pro-ateos", me llaman la atención varias circunstancias que se mueven entorno a ello: la razón por la cual los ateistas se están moviendo, la manera como se está desenvolviendo el asunto entre las dos partes (creyentes y no creyentes), la manera como la iglesia católica y otras denominaciones han respondido, pero más importante aún, el efecto que puede generar en las personas y en la sociedad.

Según las fuentes que he consultado (marketingdirecto.com y elpais.com) la noticia comienza con la respuesta que da un teórico de la evolución ante el acoso de una secta "cristiana", la cual condena al infierno a quienes no creen en la salvación por medio de Jesucristo. Aterrado por la sentencia, el señor Richard Dawkins decidió promover el ateismo en complicidad con una periodista inglesa que también se vió agotada por la satanización de la vida por parte de algunos llamados a promover la fe en Cristo (lo cual está muy bien si no hay fundamentalismo de por medio). Tal fue el ímpetu de la iniciativa que lograron recaudar fondos de gente del común, adicional de conseguir el apoyo de librepensadores y organizaciones que promueven este tipo de ideologías. El fin era publicitar en ciertos buses londinenses (y ahora en varias ciudades de Europa como Madird, Barcelona, Valencia, Génova) la frase "Dios probablemente no existe. No te preocupes y disfruta de la vida".

Ante lo anterior los creyentes se organizaron para responder a la campaña con la misma estrategia, sólo que la frase cambia por "Dios sí existe. Disfruta de la vida en Cristo". En este momento ya se encuentran circulando ambos mensajes en las calles de ciudades que han visto crecer el cristianismo a lo largo de la historia y las respuestas ante tanto estímulo no se han hecho esperar. Incluyendo la mía, que soy un convencido de la existencia de Dios.

Yo veo que el problema no es la aseveración pues incluso si me mira bien, al menos los ateos no se la jugaron con la muerte de Dios. Veo todo este asunto como una buena oportunidad para preguntarse ¿En donde esta mi fe?. Que no es otra cosa diferente a preguntarse "¿Creo en Dios porque alguien me lo dijo o porque realmente lo siento?". Esta discusión no es nueva en la historia, salvo que ahora se está echando mano de lo último en marketing para promoverlo, pero la circunstancia como tal es tan antigua como la misma fe.

Más allá de lo que muchas organizaciones, muchas doctrinas y en especial la Iglesia puedan hacer al respecto, es un buen momento para afianzar el criterio propio y ver de qué manera se cultiva la fe en cada quien; comencemos por cada uno y luego sí preocupémonos por divulgarla. Algunos creen en sí mismos (los ateos), algunos en la suerte o el destino y otros creemos en Dios. Y todo es respetable según como se le mire. Si bien los cristianos estamos llamados a evangelizar como compromiso desde el bautismo, también es cierto que también se nos pide NO JUZGAR, pues ese Dios en el que creemos es quien tiene la potestad para ello. La disputa puede ser tan enrredada como se quiera pues sea blanco o negro, incluso entre creyentes y no creyentes hay divisiones (tristemente para el cristianismo desde mi punto de vista). Así que el tema no es lo público del dilema sino lo que cada quien siente. De ahí en adelante surgen los efectos para la sociedad.

Así que, al menos desde donde yo lo veo, no nos queda más que contemplar un par de opciones para sortear lo que sucede: participar en discusiones sanas al respecto y con el testimonio propio sustentar nuestros argumentos de fe. Por otra parte queda abierta la invitación a orar por lo que acontece, seguir pidiendo por todos (los que creen y los que no) y esperar con la firme convicción que cuando llegue el ocaso de nuestra vida terrenal, sea la verdad la que tome partido.

Para mayor referencia: http://www.marketingdirecto.com/noticias/noticia.php?idnoticia=30449, http://www.elpais.com/articulo/espana/Visto/bueno/campana/Probablemente/Dios/existe/elpepuesp/20090112elpepunac_11/Tes

lunes, enero 12, 2009

Bendición irlandesa

Que los caminos se abran a tu encuentro,
que el sol brille sobre tu rostro,
que la lluvia caiga suave sobre tus campos,
que el viento sople siempre a tu espalda.
Que guardes en tu corazón con gratitud el recuerdo precioso de las cosas buenas de la vida.
Que todo don de Dios crezca en ti y te ayude a llevar la alegría a los corazones de cuantos amas.
Que tus ojos reflejen un brillo de amistad,
gracioso y generoso como el sol,
que sale entre las nubes y calienta el mar tranquilo.
Que la fuerza de Dios te mantenga firme,
que los ojos de Dios te miren,
que los oídos de Dios te oigan,
que la Palabra de Dios te hable,
que la mano de Dios te proteja, y que,
hasta que volvamos a encontrarnos,
otro te tenga, y nos tenga a todos,
en la palma de su mano.

Tomado de www.pastoralsj.org

viernes, enero 09, 2009

Salve uno como si fueran 2.500

Es interesante hacer un recorrido por la historia de personas que arriesgan todo porque tienen algo claro: que están en el mundo para hacer el bien. Este es el caso de Irena Sendler quien se expuso a torturas por el hecho de haber salvado 2.500 niños de las garras del Holocausto Nazi.

Todo esto me lleva a pensar que si bien todos podemos aspirar a salvar ese número de niños (ojalá más), sería tan gratificante para Dios y para la humanidad que nos arriesgáramos a salvar al menos uno.

Y no hablo de ponerse la capa y buscar por las calles a ver qué niño están azotando. Podemos comenzar por nuestra propia casa. Con nuestros hijos o sobrinos o su nietos, haciendo parte de su buen crecimiento, inculcándoles valores pero sobre todo enseñándoles y mostrándoles lo que es el amor verdadero. Más allá de querer repetir lo que todo el mundo dice pero no muchos practicamos con la constancia necesaria, se trata de entender qué puede ser una tortura para una persona que a sus escasos años jamás pensará como adulto.

No se necesita estar en un campo de concentración para intimidar o maltratar un menor. Con el simple hecho de regañarlo injsutificadamante, de hacerle daño así sea con una mirada lo suficientemente hiriente como para hacer sentir miserable al más noble, incluso sólo por desconocer lo que es capaz, de jamás ofrecerle una disculpa, de no ponerle atención o simplemente hacerlo testigo de una mala acción entre muchas otras situaciones, ya estamos haciendo que una persona más en el mundo crezca con el deseo infinito de desquitarse con el que pueda.

Se trata pues, de ser lo más consciente posible a la hora de tratar un niño pues por algo que usted o yo hagamos (o dejemos de hacer en frente de él), se le puede generar una marca de por vida que sólo Dios sabrá cómo sanar.

Ahora, si nuestro entorno carece de niños o tal vez queremos ir más lejos porque la tarea la hemos hecho bien hasta ahora, extendamos una mano al que sin ser nada nuestro lo necesita. Pero no dándole dinero sino alimetándolo, vistiéndolo o educándolo. En el mundo existen gran cantidad de personas que procuran lo mismo y han contribuído a que muchos de ellos se levanten, se recuperen y que edifiquen sociedades menos resentidas. Nosotros podemos aumentar ese número de quienes buscan devolver a Dios lo que Él en su infinita bondad nos ha dado.

Tan lejos como llegó Irena lo podemos hacer cada uno, así no alcancemos el mérito de ella, que con esfuerzo pero sobre todo con fe en Dios logró no sólo salvarlos a ellos sino a ella misma también. Hagamos parte del rescate de un niño más, para que no sea tan tarde que debamos escribir sus nombres en papeles tristes y esconderlos en envaces de vidrio para que algún día, alguien de buena voluntad decida rescatarlos cuando ya pueda ser tarde.



Para mayor referencia visitar http://es.wikipedia.org/wiki/Irena_Sendler

martes, enero 06, 2009

La costumbre al divorcio

Llevo un año y casi cuatro meses de casado y para muchos aún sigo en luna de miel, incluso algunos, con mucha seguridad afirman que sólo dura los primeros cinco años (no falta el "aguantador" que le puso diez). Ante eso debo decir que sí, estoy de luna de miel, pero espero que no sea por cinco años sino para siempre.

Más allá de la promesa romántica de jurar amor eterno, estoy convencido que uno se casa para comprometerse a que ese deseo permanezca vigente. Más de uno que ya lleva un buen tiempo de matrimonio encontrará un tanto ilusas estas palabras, y lo respeto, pues tengo muy claro que el reto de compartir la vida con otra persona no es nada fácil. Sin embargo me gustaría que, si le parece interesante, en diez años nos crucemos al menos un correo electrónico y me pregunte si aún siento lo mismo.

Si me atrevo a tanto no es porque me lo haya soñado o que esté tan ciegamente enamorado como para no tener los pies en el suelo y desconocer que por una u otra razón el encanto puede desfallecer. Me atrevo porque realmente lo deseo, simplemente por eso. Y si no fuera por ese simple hecho creo que ni siquiera me hubiese puesto en la tarea de comprometer mi vida al lado de la persona que amo.

Es por todo lo anterior que veo con tristeza cómo el lazo que se establece entre dos personas ante nadie más ni nadie menos que Dios, se disuelva tan fácil como más de uno lo espera. No es difícil escuchar en las reuniones sociales cómo más de uno se queja porque los matrimonios hoy día no sean serios y hasta alegan que "los muchachos de ahora" lo toman como un arrebato o simplemente que se impulsaron por decisiones acaloradas en el fulgor del flirteo. Y tienen razón, pues es verdad que la determinación no es sólo del corazón sino que merece una buena dosis de razón al momento de su discernimiento. Sí, es fácil juzgarlo pero qué se ha hecho para que eso suceda y lo que es peor, qué NO se ha hecho para que año tras año no aumenten las cifras de divorcio.

Es verdad, en teoría no hay mucho por hacer pues eso le atañe solamente a la pareja que ante el conflicto no ve otra salida. Pero ¿estamos seguros que eso es así? Si nos damos cuenta, con al menos evitar lanzar al aire cualquier justificación al divorcio, ya estamos haciendo mucho. Ahora, si ya estamos casados y la convivencia ha sido placentera o -hablando objetivamente para algunos casos- llevadera, basta con que le mostremos al mundo el agrado por ello y no hacer ningún esfuerzo por disimularlo. Esto, aunque sea difícil de creer, sirve para "vender la idea" que la unión de dos personas tiene sentido, incluso llegando a antojar a más de uno. No son pocas las personas que me he cruzado y que se refieren a una pareja como "son tal para cual, hasta da gusto verlos y hacer lo mismo que ellos".

Es así como si bien creo que el "divorcio express" está tomando fuerza, también creo que en nuestro entorno mercantil se puede "comercializar" el antojo por el matrimonio, no express ni mucho menos porque de ahí sale que a los tres meses la pareja se termime odiando, sino el que se concibe con todo el sentimiento y la razón del caso. La iglesia da sus razones respecto al aumento de las separaciones y son respetables pero tanto ellos como los que decimos pertenecer a ella, estamos llamados a ser contribuyentes en sanas decisiones, a hacer parte de la madurez sentimental de quienes nos rodean y más si el lazo que nos une a ellos es tan estrecho como la familia o los amigos del corazón. Coincido con quienes piensan que el crecimiento del número de familias disueltas se convierte en una bomba de tiempo ante una sociedad que no sólo precisa de células íntegramente formadas sino que como anhelo común tienen la paz y al armonía.

Si dió el "sí" convencido, independiente a sus creencias donde se enseña que el matrimonio es para siempre, antoje al que se le atraviese. Hágalo y verá que sí funciona.

Para mayor referencia remitirse a http://caracol.com.co/nota.aspx?id=741672

lunes, enero 05, 2009

Ojo por ojo?

Es impresionante la historia de Ameneh Bahramí. Por donde se le mire hay drama; y sin el ánimo de especular o sacar partido de esa historia ni mucho menos juzgar, vale la pena detenerse a revisar la historia: una mujer que de repente ve truncada su vida gracias al egoísmo de otra, sólo porque no quiere casarse con él.

Ante la negativa, el desilusionado (que además es un extraño pues a duras penas conocía a Ameneh) no ve otra alternativa más que bañarla en ácido por no acceder a su petición. Desde mi punto de vista, lo cruel de este asunto no es tanto el acto criminal como tal sino que se pretenda creer que una vez ella pueda llevar a cabo lo que la justicia falló a su favor (aplicar 20 gotas de ácido en cada ojo a su agresor), las huellas desu desgracia se borren, no de su cara sino de su corazón.

Insisto, no quiero juzgar. Estoy seguro que no tengo la más remota idea de lo que esta mujer está sintiendo, pero me pregunto si realmente el vengarse del infame que arruinó su vida será suficiente para sentirse mejor. Ojalá que independientemente a lo que sucedea, ella se reencuentre con la tranquilidad y la esperanza.

¿Usted cree en el regocijo que trae la ley del Talión?

Para mayor referencia remitirse a http://www.semana.com/noticias-gente/ojo-ojo/119250.aspx

Acerca de mí

Diseñador gráfico de la UJTL de Bogotá, Colombia. Convencido que algo nuevo se aprende todos los días y mejor aún, no se puede callar. A alguien le servirá.

jcbg's shared items

Miembro de Usarte.org